A solo 10 minutos de la salida de mi tren, enmedio de un atasco en el que se avanzaba 2 metros cada minuto, le doy las gracias al conductor del ricksaw, le pago y le digo que se quede con el cambio. Corro entre basura, perros, mendigos, vacas, y alguna cabra, hacia la estacion a traves del humedo aire nocturno. Tuve suerte, y un militar me explico que el siguiente tren seria el mio. Suena la bocina y derrepente una masa de gente se mueve hacia el anden. El tren aun no se ha parado, pero los hindus, ya se estaban subiendo, para tomar algun buen asiento en la clase mas baja. Por suerte mis billetes eran con litera y todo, asique pude esperar a que el tren se parara para subir a mi vagon.
Tras un viaje de unas 10 horas para recorrer 300 km, el tren llega a Haridwar. Esta ciudad es una de las mas sagradas de india y se ubica al norte de delhi. Por ella pasa el rio Ganges, y cada dia se celebra una ceremonia en la cual se lanzas ofrendas a los dioses al rio en forma de pequenyas velitas, al atardecer.
Es una ciudad rica en templos y en gentes, a pesar de no ser muy turistica . En esta ciudad veo de cerca por primera vez a algunos shadus. Por desgracia el rio estaba casi seco, debido a que en enero de 2010, se producira la gran ceremonia que se celebra solo una vez cada 10 a;os, a la cual asisten millones de personas y estan limpiando la zona para la ocasion.
A lo lejos entre la neblina se empieza a distinguir una leve silueta, sutil, casi indistinguible. La cordillera del Himalaya empieza a dejarse ver.
Al dia siguiente el viaje continuaria, esta vez por carretera, hacia Risikesh donde ahora me encuentro.
Qué pasa páharrako!
ResponderEliminarTe escribo desde casa vivito y coleando aunque con un par de kilos menos; o quizás más, según se mire.
Disfruta mucho y enhorabuena :)